Las mujeres que le apuestan a la paz: realidades y retos.
NÓMADAS, LA APUESTA DE JÓVENES CALEÑOS POR CULTIVAR ACCIONES NOVIOLENTAS Y DE PAZ
LLAMADO POR LA PAZ Y LA VIDA DE LAS MUJERES DESDE LAS IGLESIAS.
8 de marzo: Por las que Cuidan.Conmemoración del día internacional de las Mujeres.
“He aquí que yo les traeré sanidad y medicina; y las curaré, y les revelaré abundancia de paz y de verdad.” Jeremías 33-6
Como Justapaz, organización de la Iglesia Cristiana Menonita de Colombia, que trabaja por la promoción y garantía de los Derechos Humanos, los derechos de las Mujeres y la niñez en Colombia, nos pronunciamos frente a la situación de las mujeres en el país.
Los días 15 y 16 de diciembre de 2020, Mujeres de diversas iglesias del país, que le han apostado a la construcción de Paz desde y para los territorios, nos hemos encontrado para impulsar una propuesta inicial de exigibilidad de los derechos de mujeres y niñas para la construcción de una sociedad Justa, Noviolenta y en Paz con toda la creación, basadas en un análisis de la realidad que vivimos las Mujeres.
Nuestro silencio no debe naturalizarse, las mujeres de iglesia levantamos la voz frente a la realidad que viven las mujeres en Colombia, tenemos mucho para aportar, acompañar, fortalecer y ayudar para visibilizar las injusticias, los tiempos difíciles que las mujeres enfrentamos y que se ha recrudecido en los últimos meses.
Apropiarnos de nuestra realidad en una práctica consecuente hacia la dignificación, donde la mujer comience a reconocerse o continúe siendo una agente activa, protagonista de su propia vida y de su entorno social, político, económico y ambiental.
Impulsadas y comprometidas por el mensaje de Jesús en la construcción de la Paz en el contexto que vivimos en Colombia, donde la vulneración de derechos es una realidad constante y la vida ha perdido su valor, en el marco del Conflicto Armado que no cesa.
Las Mujeres de iglesia alzamos nuestra Voz profética: Declaramos, nos comprometemos y llamamos:
- A la participación activa y la veeduría de las Mujeres de iglesias en los escenarios de Construcción de Paz en el marco de la implementación del Acuerdo Final para la terminación del conflicto y la construcción de una Paz estable y duradera desde la mirada de la reconciliación.
- Unirnos a una sola voz frente a la situación de vulneración de derechos que vivimos día a día las mujeres urbanas, rurales, afrodescendientes, indígenas y campesinas en el territorio colombiano.
- Participar en política y hacer ejercicios de incidencia, nos comprometemos a seguir fomentando y fortaleciendo nuestras capacidades para generar e influir en espacios donde se tomen decisiones que afectan nuestra comunidades.
- Promover ejercicios de No-Violencia y de cuidado de la creación, por eso, no toleraremos ningún tipo de violencia contra los y las Colombianas, especialmente trabajaremos por la erradicación de todo tipo de violencias contra las Mujeres.
- Seguir promoviendo los diálogos con otras mujeres, construyendo desde las diferencias y los territorios, atendiendo y denunciando la situación de las Mujeres, anunciando la transformación de la realidad con la fuerza y la SORORIDAD del trabajo colectivo.
- Fortalecer los espacios de cuidado y autocuidado de las Mujeres de iglesias para acompañar en el caminar de otras mujeres y las comunidades alrededor de ello. Además de fomentar acciones para la sanación psicoespiritual.
- Mujeres llenas de profunda empatía, que promueva el no señalamiento, sino la comprensión de las realidades que aquejan la vida de las mujeres y su lugar en la sociedad.
- Articular desde las regiones el trabajo que se ha venido desarrollando de incidencia política, con las mujeres de iglesia, también en clave el proceso de acompañamiento de las mujeres y niñas que han sido víctimas del conflicto armado y otro tipos de violencia, generando pactos éticos por la vida, la paz y la Noviolencia.
- Visibilizar y rechazar todo tipo de violencias contra las Mujeres y las Niñas que se presenten en nuestros entornos comunitarios y eclesiales.
Las Mujeres de Iglesia nos reconocemos como sujetas políticas de derechos, por tanto, seguiremos denunciando y evidenciando la injusticia y la violencia contra las Mujeres, promoviendo y participando en iniciativas orientadas hacia el logro de las paces justas. Por eso llamamos a las Mujeres Cristianas Constructoras de Paz a unirse a la conmemoración del Día Internacional de la mujer, no solo el 8 de marzo sino todo el mes de marzo y todo el 2021, participando, dialogando y proponiendo; Impulsadas por el mensaje de Jesús y la guía del Espíritu Santo, seguiremos trabajando en unidad por el bienestar de nuestra mujeres y niñas en los diferentes territorios.