Personas de iglesias ubicadas en diferentes regiones del país, conforman equipos de trabajo que con limitados recursos económicos y humanos, pero con la debida preparación en la documentación de casos de violación a los derechos humanos e infracción al Derecho Internacional Humanitario (DIH), se entrevistan directamente con las víctimas, sus familiares, pastores, pastoras, líderes y liderezas eclesiales y registran los hechos de violencia. Este contacto directo con las víctimas se constituye en la fuente primaria de información para este informe. La información recopilada por los equipos regionales es entregada y sistematizada en la base de datos de JUSTAPAZ, en donde son verificados y catalogados según los tipos de violación.