FOTO: Suministrada. Miembros del ELN patrullaron las calles con fusiles en mano.

Comunicado de Justapaz sobre acciones del ELN y protección de niños y niñas y adolescentes

Desde la Asociación Cristiana Menonita para Justicia, Paz y Acción Noviolenta Justapaz, expresamos nuestra profunda preocupación y rechazo ante las acciones del frente Juan Fernando Porras Martínez del ELN, que involucran a niños, niñas y adolescentes en el corregimiento de Versalles, Tibú, Norte de Santander. Reiteramos nuestra llamado a la construcción de una sociedad justa, noviolenta y en paz.

Es importante destacar las graves afectaciones que este tipo de acciones tienen en la vida de los niños, niñas y adolescentes, así como en la comunidad en general:

1. El involucramiento de los niños, niñas y adolescentes en actividades relacionadas con el conflicto armado, incluso de manera simbólica, afecta su desarrollo psicosocial, sus oportunidades educativas y su proceso de formación integral. Además, los expone a situaciones de riesgo y violencia que pueden tener consecuencias a largo plazo en su bienestar y en el de sus familias.
2. La presencia de grupos armados en las comunidades y su interacción con los niños, niñas y adolescentes genera un ambiente de temor e inseguridad que limita la participación ciudadana, afecta la convivencia y obstaculiza el desarrollo comunitario.
3. La normalización de la presencia de grupos armados en la vida cotidiana de la población civil en especial con los niños, niñas y adolescentes envía un mensaje equivocado sobre la resolución de conflictos y la construcción de paz, perpetuando la violencia y dificultando la construcción de una sociedad justa y equitativa.

Ante esta situación, instamos:

Al ELN:

1. Respetar el Derecho Internacional Humanitario (DIH), evitando cualquier acto que involucre directa o indirectamente a la población civil y en particular a niños, niñas y adolescentes en actividades relacionadas con el conflicto armado en respeto del principio de distinción.
2. Facilitar la liberación y desvinculación de los niños, niñas y adolescentes involucrados y cooperar con las instituciones y organizaciones encargadas de su reintegración e inclusión social.

Al Gobierno Nacional:

1. Promover el fortalecimiento de entornos protectores, incluyendo iglesias y organizaciones religiosas, y reconocer el papel mediador y pacificador del personal religioso en situaciones de conflicto.
2. Implementar políticas de prevención del reclutamiento, utilización y cualquier forma de explotación de niños, niñas y adolescentes por parte de grupos armados ilegales y garantizar su efectividad mediante la asignación de recursos suficientes sobre todo en lo local y la cooperación interinstitucional.
3. Garantizar el acceso a la justicia y la reparación integral para los niños, niñas y adolescentes afectados por el conflicto armado, en línea con los estándares internacionales de derechos humanos y DIH.

A la oposición política:

1. Abstenerse de utilizar el tema de los niños, niñas y adolescentes involucrados en el conflicto armado con fines políticos y partidistas, y enfocarse en la promoción de soluciones constructivas y sostenibles.
2. Participar activamente en la elaboración de políticas y acciones que promuevan la protección de los niños, niñas y adolescentes y la construcción de una paz duradera en Colombia.

Desde Justapaz, reafirmamos nuestro compromiso con la construcción de una sociedad en la que los niños, niñas y adolescentes puedan crecer y desarrollarse en un ambiente seguro, libre de violencia y respetuoso de sus derechos. La responsabilidad de proteger y garantizar el bienestar de la niñez y la adolescencia es de todos y todas, y es fundamental para alcanzar una paz duradera en nuestro país.

Atentamente,

Martín Nates

Director y Representante legal